Situado entre los dos riscos que enmarcan el pueblo, y a 30 metros de altura sobre el río Najerilla, nos encontramos con el “Puente de la Madre de Dios”, construido en el siglo XVIII. Es uno de los puentes más espectaculares de La Rioja, formado por un arco único de alrededor de 12 metros de diámetro, anclado sobre roca natural en las dos márgenes de la garganta del río.
Caminando por los tres barrios, Eras, Mediavilla y Cuevas, encontraremos en sus calles varias casonas nobles de piedra de sillería y mampostería, con escudos del siglo XVII.
Podremos visitar sus dos iglesias, la de “San Pedro” en el barrio de Cuevas, y la de “SanAndrés”, en Mediavilla, a la que llegaremos subiendo desde la plaza Mayor por la famosa “Cuesta de los Danzadores”.
Iglesia de San Andrés: Construida en sillarejo y mampostería entre los siglos XV y XVI, consta de tres naves de planta cuadrangular, cubiertas con bóvedas de crucería estrellada. Es de destacar en su interior el retablo barroco del altar mayor con abundancia de tallas y relieves con escenas evangélicas. Fue declarada Bien de Interés Cultural el 15 de enero de 1982.
Iglesia de San Pedro de Cuevas: Construida entre los siglos XV y XVI, de planta rectangular y una única nave cubierta de bóvedas de crucerías estrelladas.
Dando un paseo de 2 km por un bonito camino arbolado, llegaremos a la Ermita de Santa María Magdalena (SXVIII), patrona de la villa de Anguiano, declarada Bien de Interés Cultural en 1984.
Y mientras disfrutamos de la naturaleza y del descanso que allí encontraremos, podremos tener la ocasión de ver “la crecida” de la Fuente intermitente.
Está, formada por quince caños colocados en cuatro niveles (cinco en el nivel inferior, 4 en el segundo, 3 en el tercero y otros 3 de gran tamaño en el nivel superior). Lo sorprendente es que la cantidad de agua que mana por los caños es variable, pasando de tener un caudal mínimo por los caños inferiores a manar agua muy abundante por los 15 caños. Este fenómeno varía dependiendo de la época del año, pudiendo ocurrir dos veces al día o cada hora, dependiendo de la cantidad de agua que el acuífero lleva a un sifón natural, que al llenarse rebosa y se vacía dando lugar a “la crecida”.
También en Anguiano, a 15 Km del casco urbano, podremos visitar el “Monasterio de Valvanera”, situado en plena naturaleza, con gran belleza paisajística, tiene su origen entre los siglos X y XI y allí se da culto a La Virgen de Valvanera, patrona de La Rioja.